terça-feira, 30 de agosto de 2011

Roger Waters en River: siete razones para ser el más grande.

Ya fue, Roger, admití que somos lo mejor que te pasó. Responsable del récord absoluto de una seguidilla de recitales en River (ya dijimos que había igualado, hasta ahora, a Soda Stereo con su gira Me verás volver y superado el número alcanzado por nada menos que los Rolling Stones en sus dos primeras visitas: la del Vooodoo Lounge en 1995 y el Bridges to Babylon Tour en 1998), Waters sigue generando furor desenfrenado en los fanáticos. Las entradas vuelan: hoy se pusieron a la venta los tickets para la sexta fecha pautada (la del 15 de marzo) y la desesperación por conseguirlas dio lugar al rumor de confirmación de una séptima función. Y así parece: el tipo agregaría un show más para el 16 o el 17 de marzo (fecha en la que debería tocar en Porto Alegre, pero todo puede suceder...) y se convertiría en el mismísimo Rey del Mundo. Mañana se confirmará el día elegido y cuándo estarán disponibles las entradas.


Mientras tanto, ¿qué pasa? Habíamos intentado explicar el fenómeno, y la diferencia de convocatoria con respecto a su visita en 2007, centrándonos en la llegada con el The Wall Tour y el revival de Pink Floyd durante 2011 con le plan de reediciones y la reunión del bajista con Gilmour y Mason en mayo de este año. Sin embargo, siete Estadios River agotados (porque lo estarán) no se terminan de justificar sólo con estos factores; ni siquiera agregando la nostalgia que una pieza fundamental de la historia de la música de todos los tiempos puede generar en una audiencia hambrienta de rock y adicta a los clásicos. Igual, listamos siete momentos del increíble show que traerá al Pink Floyd a repasar una de sus obras máximas, más allá del espectacular despliegue y del significado intrínseco del álbum y la densidad inigualable de su versión cinematográfica. Desde "In The Flesh?" hasta "Outside The Wall", siete momentos épicos que vas a disfrutar en vivo en directo:



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